lunes, 8 de mayo de 2017

El mito de nuestro tiempo: El ocaso de la personalidad


Este artículo pretende reflexionar acerca de lo que vivimos a diario, como una ilusión paralela, a lo que realmente experimentamos. Ante esto, se encuentran implicados los imaginarios sociales con la conducta mitológica. Cómo saben, los mitos, tienen la finalidad de relacionar “la sociedad con el mundo de la naturaleza y el cosmos” (J. Campbell, 1998). Además, sirven para explicar la creación del mundo y los hechos que se relacionan con la misma.

Aun en estas épocas de modernidad y tecnología, se pueden rastrear bajo la forma de demandas imaginarias, intereses políticos y sobre todo de poder, un sistema simbólico entorno a la dominación dentro del contexto social. Adquiriendo así, una serie de jerarquías ficticias entorno a la sociedad, des-vinculando la comunicación en términos de distanciamiento, obligando a someter los unos a los otros bajo una verdad.

Incluso, decir que “esta verdad está sometida al poder, a un poder simbólico” (Bourdieu, 1989 Pág . 8) referente a la dominación de masas de que aquellos que se quieren aprovechar de esas carencias y otros que quieren suplirlas, bajo representaciones investidas de imágenes y símbolos cargadas de emociones, tal como nos lo presentan la religión, los medios de comunicación, la política y la ciencia no se queda atrás.

Con esto último, no quiero ser despectivo, sino hacer una invitación, a todas las personas que están leyendo este artículo a que reflexionen sobre su actuación y la coherencia dentro de la sociedad y al uso que le den a sus instituciones, palabras, actos y credos. Porque lo que no se han dado cuenta, es que los pensamientos y las emociones, tienen un significado entre lo que se piensa, dice y hace para influir sobre toda la humanidad, empezando con la actitud.

A través de la historia, hemos podido dar cuenta, de que todo es cíclico, hay modas que van y vienen, temas, guerras, paz, una y otra vez. Así, dando certeza de que en todas las épocas siempre ha habido una cosmovisión (Weltanschuung) y un espíritu de tiempo (Zeitgeist) que prevalece desde lo humano para lo humano.

Esto es tan solo para enfatizar que el continuo cambio y transformaciones de los símbolos, son los que han permitido abrir una de varias posibilidades siempre para utilizar consciente y satisfactoriamente al mito, para resolver los dilemas de su tiempo. Sin embargo, “el hombre moderno no se guió más por el mito para interpretar y representar todas aquellas fuentes profundas de toda su existencia porque el pensamiento científico suplió al pensamiento primitivo” (Lévi-Strauss, 2002).

Entonces, al dejar esta conexión ha permitido que la búsqueda de sentido se quede estancada y por lo tanto, se contente con desconectar al mundo por medio de apariencias que se expresan en facilidades que particularmente ofrece la tecnología, pero lo van dejando sin personalidad y sobre todo, alejando toda posibilidad de desarrollar individuación.

El fenómeno que la individuación colectiva ha estado limitada y apoyándose en su opuesto. Así pues, la vida moderna tiene tantos vacíos, porque la dinámica que se utiliza es la de dar y entretener, más no dejar que la contemplación o reflexión entren en acción.

La individuación no consiste únicamente en sucesiones de imágenes del inconsciente. Éstas son sólo parte del proceso, representando su realidad interior o trascendental. Su complemento necesario es la realidad exterior, el desarrollo de la individualidad y el destino que le espera. Ambos aspectos ( lo consciente y lo inconsciente) se manifiestan tanto en “imágenes interiores como en acontecimientos de la vida real” (Aniela Jaffé, 1995).

Los mitos de la creación están saturados de un sentido del destino que continuamente llama a todas las formas creadas al imperecedero del cual emergieron por primera vez. “Las formas avanzan poderosamente, pero inevitablemente alcanzan su apogeo, se derrumban y retornan” (Campbell, 1959 Pág. 153).

Por eso, la respuesta al mito tiene que ver con la vida, la realización de todas las oportunidades que se presenten y aprovecharlas. Así, cada camino que se tome y bajo las direcciones que corresponden a determinadas situaciones arquetípicas, es la razón por la cual aparecen como variantes recurrentes en el simbolismo de los mitos y los cuentos de hadas. 

En la psicología analítica, esto se ve reflejado en el arquetipo del sí-mismo. Cómo “el conjunto global de todos los fenómenos psiquicos en el ser humano, siendo la expresión de la unidad y totalidad del la personalidad global” (Jung, 2013 § 814). Es decir, la totalidad integrada de contenidos tanto conscientes como inconscientes en el hombre entre su meta de vida y su destino, se experimenta como aquello que gobierna al individuo y hacia donde se dirige inconcientemente.

En ocasiones la tarea del héroe es conquistar un animal o dragón (instinto) para poder obtener el tesoro (el sí-mismo). Y otras veces su tarea es proteger y nutrir a la bestia con riesgo de su propia vida, a partir de lo cual ésta le ayudará en la búsqueda del tesoro. Así la meta de la individuación, la realización del sí-mismo, jamás se alcanza plenamente. Pero permite encontrarse algo más valioso. Tal como lo dice la sentencia alquímica : “Naturalissimum et perfectissimun opus est generare tale quale ipsum est <la obra más natural y perfecta es generar tal cual es uno mismo>” (Jung, 2005. § 331).

Al trascender la conciencia, el arquetipo del sí-mismo nunca puede ser aprehendido en su totalidad y debido a su infinitud tampoco es posible vivenciarlo completamente en la vida real. “La individuación exitosa jamás es absoluta, sólo es un logro óptimo de integridad. Sin embargo es justamente la imposibilidad de esta tarea la que la hace tan significativa” (Aniela Jaffé, 1995).

Por eso mismo, considero que todas las vivencias que experimentamos en el día a día. Es un llamado a la transformación, a la comprensión simbólica de superar las pruebas en ganar iluminación en la amplitud y penetración de la personalidad. De ahí que “Muchos héroes míticos, por ejemplo, son un paradigma no sólo de la forma de individuación de un solo individuo, sino también de la evolución de la conciencia en el curso de la historia". (Jacobi, 1983).

Ante el fenómeno de la individuación y la cosmovisión podemos decir que se ha ido perdiendo poco a poco, tanto así que la tecnología y los medios de comunicación se han vuelto los nuevos dioses. Pero, todo depende de nuestra actitud personal y responsabilidad social, que le demos a nuestros pensamientos y sentimientos. Porque ya sabemos que hasta las teorías más precisas, se pueden convertir en palabras ineficaces a la hora de enfrentarnos a la realidad.

Esto es un importante, porque la unilateralidad destina solo un pedestal a la personalidad egocéntrica, en donde la ideología, vanidad, el poder y la corrupción, le da totalmente la espalda a la verdadera existencia, que es vivenciar la personalidad desde sí mismo para los demás, sin pasar por encima de nadie.

Al menos dedicarle un momento de nuestro preciado tiempo a la voz interior, “la voz de una vida más plena, de una consciencia más amplia. De ahí que en sentido mitológico el nacimiento del héroe o el renacer simbólico coincida con la salida del sol, pues convertirse en una personalidad equivale a un incremento de la consciencia. Por la misma razón, la mayor parte de los héroes se caracterizan por atributos solares, y el momento de nacimiento de su personalidad grande se denomina «iluminación»”. ( Jung, 2010. § 318).



Bibliografía para los que quieran profundizar:

  • Bordeau, P. (1989) O poder simbólico. Editorial Bertrand. Brasil S.A. Rio de Janeiro. 
  • Campbell, J. (1998) El poder del mito. Barcelona, Emecé 
  • Campbell, J. (1959) El héroe de las mil caras. Fondo de Cultura Económica. México 
  • Jaffé, Aniela (1995) El Mito del Sentido en la obra de Carl Gustav Jung Editorial Mirach, S.A. Madrid 
  • Jacobi, J. (1983). The Two Kinds of Individuation en The Way of Individuation, New York: Meridian 
  • Jung, C.G. (2013) Tipos psicológicos. Obra completa Vo. 6 Editorial Trotta S.A.Madrid 
  • Jung, C.G. (2005) Psicología y alquimia. Obra completa Vol.12 Editorial trotta S.A. Madrid. 
  • Jung, (2010) Sobre el desarrollo de la personalidad. Obra completa Vol.17 Editorial Trotta S.A.Madrid. 
  • Levi Strauss, C. (2002) Mito y Significado. Alianza editorial. Buenos Aires

viernes, 20 de enero de 2017

Carl Gustav Jung y la imaginación activa

Este breve artículo busca exponer tres aspectos importantes acerca de la imaginación activa con el fin de poder aportar algo más descriptivo, de tan interesante temática. Por lo tanto, en un primer momento se hablará de los aspectos más importantes de la Imaginación Activa. Tales como los inicios, autores y sobre todo, esclarecer la técnica. En segunda instancia, poder elucidar los fundamentos de la técnica junto al procedimiento y punto de vista de algunos autores. Y por último, mencionar algunas de las limitaciones de la técnica.


Aspectos Importantes de la Imaginación Activa

Como ha de saberse está "técnica no fue propiamente creada por Carl Jung" (Berta, 1956) , sino de los estudios de un químico que comienza desarrollando su idea a partir de un auto proceso. Y del cual dio fruto al libro “Die Magie als experimentelle naturwissenschaft” (La magia como una ciencia natural experimental)  editado en 1912, que explica en su autoanálisis creativo, una travesía de cómo por medio de alucinaciones acústicas y visuales se puede hallar la principal herramienta para poder establecer diálogos con lo inconsciente, teniendo en cuenta la importancia en la personificación y roles de una serie de personajes que tan solo aparecen de manera automática.  

Por otro lado, tenemos los trabajos de Herbert Silberer "Probleme der Mystik und ihrer Symbolik" (Problemas de la mística y su simbolismo) que explica como las imágenes y los símbolos, percibidos en un estado hipnagógico son auto simbólicos. Es decir, que su manifestación produce un esfuerzo por pensar, debido a dos elementos antagónicos que se presentan de las imágenes. Por lo tanto, son representativos, porque reflejan el estado físico o mental de una persona.

Entonces, gracias a esto permitió a Jung con algunos de los presupuestos para comenzar a elaborar el concepto de imaginación activa, Además, por medio de la vía auto empírica pudo adherirlo como una potencial técnica para la psicoterapia. En la cual se encuentra plasmada en su travesía el libro rojo. Ante esto Jung, elucido como“Mi experimento más difícil” (Jung, 2009. Pág. 200).

Así pues, es pertinente decir, que la técnica es algo que está sujeta a un completo proceso. Pero antes que todo, debemos preguntarnos. ¿Qué es la imaginación o que entendemos de ella? Por eso, es importante aclarar es que cuando hablamos de imaginación, hablamos del poder de representación, del poder de los hombres de crear fantasías. Tener habilidades imaginativas,  refiere a la capacidad de generar una representación más o menos clara de algo que ya no existe, o que no esta presente frente a nosotros, o que según, nunca existió o nunca incluso existirá. 

Si bien, estas  imágenes que surgen de la imaginación son principalmente o más habitualmente visuales, no necesariamente deben ser de esa naturaleza, sino que también la imaginación puede producir representaciones táctiles, gustativas, aromáticas o por su puesto auditivas. "Todas estas formas de representación imaginativa, tienen su expresión en el arte y en la ciencia". (Hanna, 1981). De alguna forma, todo acto creativo tiene como base la capacidad de imaginación, siendo al mismo tiempo su producto y su  estímulo.

Esta capacidad creativa de la imaginación, nos hace pensar en la existencia de una fuerza dinámica, Jung la denominó fuerza creativa, a esa energía que permite la función trascendente:

(…) “En lo que alcanza a mi experiencia, me da la impresión de que existen dos tendencias diferentes: una esta orientada a la creación y otra a la comprensión…
cuando pesa más la fuerza creativa, los materiales obtenidos son transformados, ampliados y sometidos a una especie de condensación de los motivos en símbolos más o menos estereotipados, que estimulan la imaginación creativa". (C.G. Jung, OC.# 8 Párr. 167,172, 173).

Algo que se debe tener en consideración, A este punto, Byington también considera que:

“Para reconocer plenamente la fuerza creativa simbolizadora de la imaginación es imprescindible estudiar su actuación consciente e inconsciente y en ella incluir la función trascendente descrita por Jung”. (Byington, 2008. Pág. 90)

Asimismo Byington, entiende que al integrar esta concepción, podemos denominarla como la función estructurante trascendente de la imaginación que no sería otra cosa que la función encargada de la elaboración simbólica. Es decir, permitir que la imaginación estimule la actividad simbólica por medio de un contenido psíquico y con ello pueda traer nuevos significado a la conciencia y que permita comprender algo más sobre la realidad. Así, cobra especial importancia hacer la distinción entre fantasía y realidad. Aún, cuando la fantasía nos ayuda creativamente a solucionar distintos aspectos de nuestra vida cotidiana, con su expresión; no es suficiente, y las mismas deben tener el complemento de la actitud y realización en la realidad. De este modo, muchas veces la fantasía arrastra el temor de alejarnos de la realidad, pero según dirá Hanna: “Es esa justamente su función, la de alejarnos de la realidad para poder  conocer otras posibilidades que la realidad quizás no nos este mostrando”.(Hanna, 1981)

Por lo tanto, estamos de acuerdo en afirmar que es un fenómeno que todo el mundo conoce, pero que se desconoce el potencial de la palabra y su dinámica. Es decir, de darle un uso, más allá de su conceptualización. Sin embargo, en la obra Junguiana, la mayoría de veces las palabras: imaginación y fantasía, parecieran ser iguales en algunas ocasiones y tener la misma función. En este sentido, hay que tener cierta precaución en el uso entre estás dos palabras. Por eso, es pertinente preguntarse ¿Existe alguna diferencia significativa entre la fantasía y la imaginación en la obra de Jung? Entonces, la fantasía tendría que ver más con la creación y reproducción personal de imágenes, mientras que la imaginación estaría encargada de representar esas imágenes y activarlas por medio de los eventos simbólicos en su constante fluir y devenir trascendente. Ante esto Jung, Agrega:

“ Para mi, la fantasía es en última instancia la fuerza creativa materna del espíritu masculino. En el fondo, nunca estamos por encima de la fantasía. Sin duda hay fantasías fútiles, insuficientes, enfermizas, insatisfactorias cuya naturaleza estéril reconocerá de inmediato cualquier persona dotada de sentido común, pero ya se sabe que el funcionamiento defectuoso no demuestra nada contra el funcionamiento normal. Toda obra humana procede de la fantasía creativa. Así las cosas,¿cómo pensar mal de la imaginación? Además, la fantasía no suele extraviarse, pues está vinculada profunda e íntimamente a la base de los instintos humanos y animales. Para nuestra sorpresa, siempre acaba enderezándose. La activación creativa de la imaginación saca al ser humano de la prisión del <nada más que> y lo eleva al estado de jugador.”  (C.G.Jung. OC.# 16 Párr. 98)


De está manera, sabemos que Jung, le daba una gran importancia tanto a la fantasía como a la imaginación. Asimismo, asignándoles un papel fundamental especial para ambas palabras, pero no lo mismo dentro de su pensamiento. Aunque, es con la imaginación con la que realmente cuenta en sentidos prácticos. A pesar de ser imprevisible, es funcional en el momento en que la persona asocia imágenes y busca poder establecer sus emociones, pensando y actuando con ellas en relación a los aspectos de su vida, propiciando, así el proceso de individuación.

Fundamentos de la técnica

La técnica de la imaginación activa, tiene como fin poder estimular la fantasía del paciente para que logre conectarse con su mundo interior y permitir así la posibilidad de que los arquetipos aparezcan sin obstrucción de la conciencia, con el fin de integrar contenidos psíquicos, tanto conscientes como inconscientes por medio de la imaginación. Incluso, propiciar el proceso de individuación a través del trabajos de los sueños, análisis y asociaciones de las imágenes que van apareciendo en la psicoterapia. Además, estás imágenes se pueden amplificar o irse amplificando mediante actividades tales como pintar, escribir, moldear esculpir, etc. Sabemos que Jung, había hecho lecturas anteriores. Pero, es gracias a los ejercicios de San Ignacio de Loyola que logra encontrar un paralelo acerca de sus ideas:

(…) “Se entiende todo modo de examinar la conciencia de meditar, de contemplar, de orar vocal y mental, y otras espirituales … Todo modo de preparar y disponer el ánima para quitar de sí todas las afecciones desordenadas y después de quitadas para buscar y hallar la voluntad divina en la disposición de su vida para la salud del ánima. (…) La persona queda a otro modo y orden de meditar o contemplar debe narrar fielmente la historia de la tal contemplación…” (Arzubialde, 2009. Pág. 65)

Así pues, gran parte de "la sabiduría de San Ignacio, se hallaban en sus anotaciones". (Calveras, 1944) con los que Jung pudo implementar para una metodología y procedimiento de la técnica de la imaginación activa. Está misma técnica, analizada y citada por Jung, es la que adopto en sus escritos de los Schweizers Buch (libros negros) al Rot Buch (Libro Rojo). Que consistían en anotar todas las fantasías en los libros negros y luego las transcribía al libro rojo con ilustraciones. Es ahí, donde Jung inicia a darle forma a su técnica, pero es tiempo después que le da la utilidad terapéutica a la técnica o por lo menos la había adherido a la praxis:

"Este es un método que es utilizado espontáneamente por la propia naturaleza o que puede ser enseñado al paciente por el analista. En general se presenta cuando el análisis de los contenidos psíquicos ha constelado los opuestos en tal medida que la unificación, la reunión (síntesis) de la personalidad se vuelve una necesidad imperiosa. Una situación de este tipo se produce inevitablemente cuando el análisis de los contenidos psíquicos, de la actitud del paciente y en particular de sus sueños, ha hecho conscientes los temas y las imágenes complementarias y compensadoras del inconsciente, hasta el punto de que el conflicto aparentemente insoluble entre la parte consciente y la parte inconsciente de la personalidad se hace evidente y crítico … La solución ("solvent") no puede ser más que de un orden irracional. En la naturaleza, el equilibrio entre contrarios es siempre un proceso, es decir, un fenómeno energético: es una producción simbólica en el sentido más propio del término, haciendo algo que exprese ambos lados, de igual manera que una cascada representa simultáneamente lo alto y lo bajo y sirve de mediadora entre ellos. La cascada es en este caso el inconmensurable tercer término. En un conflicto abierto y no resuelto, se ven surgir sueños y fantasmas que, como la cascada, ilustran la tensión y la naturaleza de los opuestos preparando así la síntesis"
                                                                       ( C.G.Jung. OC.# 14 Párr. 705)

Otros autores, en el caso de Janet Dallet, la imaginación activa es establecer un continuo y consistente diálogo con el inconsciente de una forma responsable y con mayor esfuerzo por ser tan directa y difícil. Además de exaltar la importancia de la palabra activa en la imaginación activa, como algo crucial y entendiendo también, que como en cualquier relación, "si una de las partes (el ego) no participan activamente, la otra (el inconsciente) simplemente llenará el vacío siguiendo su propio camino, no controlado y no corregido". (Dallet, 1984). 

Entonces ahí ya no hay acuerdo y es muy posible que la persona pueda quedar aprisionada de sus fantasías. Incluso, que el romper una promesa en el mundo interno como en el externo, es igual y ya es o será muy difícil volver a establecer la relación o acuerdo, por muy intelectual o forzada que sea la consideración.

Asimismo, es considerada por Verena Kast, como una técnica que permite a personas que tienen dificultades para manejar su imaginación de forma espontánea, entrenar la actividad imaginativa. De este modo, estás indicaciones, apuntan a que la técnica hace efecto, solo a cierto tipo de personas, también siempre y cuando estén interesadas en tener un contacto más fluido con sus imágenes interiores y con los procesos de transformación que las mismas acarrean. También, Aniela Jaffé. Lo ve como la primera reacción a la propuesta de que la persona «imagine activamente» "consiste por lo general en suspicacia y resistencia, lo que parece comprensible en vista de la obvia irracionalidad de dicho procedimiento". (Jaffé, 1995)

Teniendo en cuenta que es un trabajo arduo y hay muchas cosas implicadas. Por lo cual, es conveniente hablar del procedimiento como tal, ya que, teniendo en cuenta los fundamentos y fenómenos implicados, es pertinente considerar, ¿Cuál es el procedimiento de la técnica? y ¿Que aspectos hay tener en cuenta?
No hay mucho que decir, en cuanto a la existencia de un procedimiento riguroso y más que una receta, el procedimiento es según la tipología de las personas. Porque, acá lo más importante es que las personas puedan conectarse con su mundo interior y subjetivo, más que acomodarse a un diseño o molde personal. 

Para poder elaborar una actitud contemplativa, es importante que se comprenda que las fantasías e imágenes, son sucesos expresados que están desarrollándose en ese escenario interior y son propios del su propio drama. Solamente que está siendo dirigido por el inconsciente. Ante esto, Jung nos comenta:

“Tome el inconsciente en una de sus formas más a mano, diga una fantasía espontánea, un sueño, un estado de ánimo irracional, un afecto, o algo parecido, y opere con él. Ponga atención especial, concéntrese sobre ello y observe objetivamente sus modificaciones. No ahorre ningún esfuerzo para consagrarse a esta tarea, siga las transformaciones subsecuentes de las fantasías espontáneas atenta y cuidadosamente. Sobre todo, no deje que ningún elemento externo entre en la operación, ya que la imagen-fantasía tiene "todo lo que necesita". (C.G.Jung. OC.# 14 Párr. 749)

Limitaciones de la técnica:

La imaginación activa tiene dificultades, en sentido de que las intervenciones del terapeuta  pueden interrumpir el flujo de imágenes del paciente, pudiendo influenciar estas imágenes con su propio punto de vista e interpretación. Esta influencia que el terapeuta puede realizar desde sus directivas puede ser un obstáculo, pero también es el factor que puede potenciar el proceso del paciente. Por este motivo, las intervenciones del analista, deben estar siempre sujetas a criticas, sujetas a la consideración de su pertinencia y no para el paciente.

Ante esto, es positivo tomar símbolos colectivamente cargados de significado. Un claro ejemplo es en una terapia grupal, en donde la elección de símbolos colectivos a todos, es necesaria. He ahí su dificultad. El no poder crear esa comunicación con las imágenes y conectar con esa otra parte de nosotros mismos. Por otro lado, no confundirla con las fantasías, sino como un proceso creativo que yace en el hombre, pero que permanece dormido. Solamente, en la mayoría de casos, es gracias a nuestros sueños o el estado de vigilia, los que nos permiten tener cierto tipo de acceso. Sin embargo, esta no es una tarea fácil, ya que se requiere de una responsabilidad y un compromiso ético de cada persona que se adentra en esta viaje de autoconocimiento. 

Para Jung, este proceso de autoconocimiento, fue su piedra angular de su teoría, además de darse cuenta de que el mundo interior es tan real, como el mundo exterior. Así pues, la técnica de la imaginación activa tiene una amplia serie de indicaciones, que en ciertos casos, la misma podría contraindicarse, o al menos, "enfrentarse con algunos limites o riesgos  que tendrán que ser puestos a consideración". (Hanna, 1981). Por consiguiente, no es una técnica que resulta apropiada para todos los tipos psicológicos y especialmente a los que no consiguen proximidad emocional entre la persona y sus imágenes. 

De todas formas esta técnica esta también contraindicada en casos con personalidad de base psicótica y su derivados (Breve reactiva, delirante, orgánica, inducida por tóxicos, bipolar, esquizofrenia, esquizofreniforme y esquizoafectivo), y en trastorno obsesivo compulsivo (TOC). 

Para finalizar, este artículo no busca hacer un recetario, sino que busca exponer e informar sobre una técnica expresiva con el fin de seguir promoviendo la investigación.


Bibliografía para las personas que quieran profundizar:

Arzubialde, S. (2009) Ejercicios espirituales de San Ignacio, Historia y análisis. Ediciones Mensajero, S.A. Bilbao, España.

Berta, Mario. (1990) La Sombra de Jung. Ediciones de la Plaza en los talleres gráficos el PAIS S.A Montevideo, Uruguay.

Byington, C.A. (2008) Psicología simbólica Junguiana. El viaje de humanización del cosmos en busca de la iluminación. Saô Pablo, Brasil.

Dallet, Janet. (1984) Imaginación activa en la práctica. Stein Murray: Jung Analysis. London, Shambala.

Hanna, Bárbara (1981) Encuentros con el alma: Imaginación Activa como C. G. Jung la desarrolló. Mexico.D.F.

J. Calveras,(1944) Ejercicios Espirituales. Directorio y documentos de San Ignacio, Barcelona, Balmes.

Jaffé, Aniela (1995) El Mito del Sentido en la obra de Carl Gustav Jung Editorial Mirach, S.A. Madrid.

Jung, C.G.  (1917-1943) Dos Escritos Sobre Psicología Analítica. Vol.7 Ed. Trotta. Madrid.

Jung, C.G. (1916-1938) La dinámica de lo inconsciente. Vol.8 Ed. Trotta. Madrid 2004.

Jung, C.G. (1955-1956) Mysterium Coniunctionis. Obra completa volumen 14. Editorial Trotta S.A. 2003.

Jung, C.G. (1935-1951) La practica de la psicoterapia. Vol.16 Editorial Trotta. 2006.

Jung, C.G. (2009) Liber Novus, The Red book. Philemon Series & W.W. Norton & Co. New York.